¡Aloha chicas! 🙂
Como bien os he estado diciendo a lo largo de estas semanas, julio ha llegado a su fin y ahora comienza mi mes de desconexión en cuanto a subir contenidos a mi página. Aunque no os voy a engañar y tengo que confesar que a mediados de mes comenzaré a darle vueltas a mi cabecita para pensar como enfocar la nueva temporada: quiero hacer algunos cambios en la web, organizarme el calendario, ir anotando ideas para próximos posts y vídeos…¡si!, habéis leído bien… ¡vídeos! 😀 Muchas me pedís cada día que «vuelva» y de verdad que lo valoro mucho. Aún está por definir la cantidad por mes, tampoco quiero pillarme los dedos y decir que voy a estar subiendo vídeos cada semana ya que igual prefiero hacer menos pero que sean porque me apetece y no forzado. No debo olvidar nunca el porqué comencé a hacerlos y quiero que todos los que suba, sean con muchas ganas, ilusión y disfrutando a tope.
La nueva dinámica no es mejor ni peor que cuando subía tantos vídeos, es simplemente diferente y está bien cambiar y no estancarse. Los cambios son necesarios y me gusta arriesgar.
La verdad es que estoy muy feliz y enormemente agradecida por la cantidad de chicas que han seguido visitando mi web cada día, transmitiéndome su cariño a través de comentarios diarios y dándome su apoyo. Y yo me quedo con eso. Puedo decir con la boca bien grande que tengo seguidoras auténticas y maravillosas. ¡Os quiero peludas!
Tengo que comentar también, que ha sido una temporada maravillosa en la que he seguido aprendiendo cosas nuevas y me conformo con que la siguiente sea al menos igual 😉 No pido más… Me siento muy afortunada por todo lo que me está pasando.
A la vuelta que ya será para septiembre, os contaré a través de un vídeo como será todo a partir de ese momento para que sepáis un poco como va a estar enfocado y saber lo que vais a poder encontrar. Mientras tanto estaré colgando cositas a través de mis redes sociales: twitter, facebook, instagram y snapchat 😀
Y ya para finalizar y antes de despedirme, quería dejaros una fábula de Esopo muy interesante y que debéis tener la moraleja siempre presente pase lo que pase 😉
«Un día un hombre y su hijo iban caminando junto a su burro rumbo al mercado, y de pronto una persona que pasaba por su lado se les acercó y les dijo:
– No sean tontos ¿Para qué es un burro sino para montarse?
Así que el hombre sin pensarlo puso de inmediato al niño sobre el burro y siguieron su camino, cuando de pronto pasó un grupo de hombres que pasaba al lado del camino le dijeron:
– Mira que niño tan perezoso, él viajando tranquilo mientras que su padre caminando.
Luego de esto el padre bajó al niño y se montó sobre el burro, pero una vez que habían llegado al pueblo, dos mujeres que pasaban le dijeron:
– Debe darle vergüenza a ese hombre estar montado en el burro y su pobre hijo caminando.
Entonces el hombre cargó de a su hijo y juntos montaron sobre el Burro, pero otra gente que los miraba mientras pasaban le dijo:
– ¿No les da pena ponerle tanto peso al pobre burro?.
Nuevamente el hombre y el niño se bajaron y tomaron un palo donde ataron y colgaron al burro de las patas, para llevarlo por el camino. Al verlos pasar todas las personas que los veían se reían a carcajadas. Sin embargo al llegar a un puente el burro incómodo al estar amarrado de cabeza trató de sacudirse y por la fuerza se les cayó al agua. Tanto así que el burro al tener los pies amarrados, se ahogó.»
Se tu mismo SIEMPRE sin importar lo que piensen o digan los demás. Olvídate querer agradar a todo el mundo, es imposible. Se auténtico, se diferente 🙂
¡FELIZ VERANO!
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