¡Hola! 🙂
¿Cómo vamos por aquí?, ¿el día se presenta intenso?.¡Mucho ánimo para hoy que esto está chupado! 😉
¿Qué os pareció la entrada que colgué ayer?, si, decidí ponerme un camisón para salir a la calle y ¡os prometo que me gustó el resultado! jajaja Podéis revisar el outfit haciendo click aquí.
——
Cada vez lo tengo más claro. Tus miedos, inseguridades, estados de ánimo, la forma en la que afrontas una situación, está totalmente vinculado a tu mente. Sin duda nuestra cabeza juega un papel muy importante en todo esto, incluso me arriesgo a decir que es un arma de doble filo y os lo explico rápidamente: si se sabe utilizar bien, podrás lograr cosas maravillosas, pero como te dejes llevar y no la controles, puede hacerte sentir la persona más infeliz e insegura.
Me niego a vivir limitada por límites (valga la redundancia) que son irreales, de humo, que solo existen en nuestras cabezas. Me pone de mal humor.
En realidad no quiero extenderme demasiado porque es un tema algo complejo y sobre todo largo, ya que son mil detalles. Así que hoy me centraré en un tema que atañe a muchas personas: el miedo a volar, a coger un avión.
No quiero dármelas de «sabelotodo», pero creo que estoy en mi derecho de contar mi experiencia vivida en relación con este tema y si puedo ayudar a alguien pues mejor que mejor 😉
Creo que se pueden encontrar diferentes grupos de personas que le tienen miedo a volar:
1. No vuelan porque lo ven un mundo y no piensan dar el paso jamás.
2. No vuelan porque en su día lo hicieron y realmente les provoca mucho estrés, por lo que lo evitan a toda costa.
3. Les da mucho respeto pero aún así dan el paso y si tienen que coger un avión, lo cogen.
4. Han vivido de primera mano la muerte de un ser querido en un accidente aéreo.
¿En qué grupo estás tu? Sin duda yo soy el 3.
Creo que aquí la palabra clave fundamentalmente es : DESCONOCIMIENTO. Y ese desconocimiento o falta de información nos hace divagar y crearnos ese miedo a volar. Porque lo que está claro es que el avión es uno de los medios de transportes más seguro y en el que menos accidentes se ven. Lo que ocurre es que cuando pasa, son tan aparatosos y duros que nos impacta. ¿Sabéis la de accidentes de tráfico hay al día? Y seguimos cogiendo el coche, la moto… ¿verdad? 😉
Dicen que:
– Es muy difícil que algo ocurra y si es así suele ser por errores humanos, no por el avión en cuestión.
– El despegue y el aterrizaje son las maniobras más delicadas.
– Cuando sientas que el avión se mueve mucho, mira a las azafatas y si están tranquilas es que todo está bien.
Antes me producía muchísimo nerviosismo, no dormía la noche antes y hasta me sudaban las manos en el despegue. Era una sensación horrible. Hasta que las últimas veces me he sentido muy segura y teniendo un pensamiento lógico y firme: «no va a pasar nada, hay miles de vuelos al día y este es uno más. Todo está bien». Podéis incluso coger aire por la nariz y soltarlo de nuevo centrándoos en la respiración. Piensa que todo está en tu cabeza y que fuera está todo bien. Cambia el chip y la perspectiva de las cosas.
En cuanto al punto 4, conozco a un chico que un amigo suyo murió en un accidente aéreo, por lo que imaginad el pánico que le tenía a volar. Aún así lo hacía y eso me parece de admirar. Gente fuerte mentalmente 😉
Y bueno, no quiero alargarme más. Espero no haberos aburrido y sobre todo que os haya ayudado aunque sea un poquito 😉 Esto es aplicable a la vida en general en realidad 🙂
¡Muchas G R A C I A S por pasar, hacer click en «me gusta» y dejarme un comentario!
¡Un beso!
♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥
Puedes seguirme también en:
44 Comentarios